Los españoles son tocones y besucones
Lo que piensan los extranjeros de los españoles
Estereotipos VIII
Hello dear friends and welcome to Spanish Podcast. I am Mercedes speaking to you from Barcelona. In our 280th episode: Are the Spaniards handsy (grabby) and kissy (or kisser). What foreigners think of Spaniards. Stereotypes VIIIth, we address an issue that directly concerns the idiosyncrasy of Spanish people: their closeness, their warmth and familiarity in interpersonal relationships, which often entail physical contact very typical of our culture and very different in relation to other cultures of the world. We will know the situations in which this closeness occurs, what the gestures and physical interactions that are put into play and what is their significance among family members, acquaintances or friends.
Hola queridos amigos y bienvenidos a Español Podcast. Soy Mercedes y os hablo desde Barcelona. En nuestro episodio nº 280: Los españoles son tocones y besucones. Lo que opinan de España los extranjeros. Estereotipos VIII, abordamos una cuestión que concierne directamente a la idiosincrasia de las españolas y españoles: su cercanía, su calidez y su familiaridad en las relaciones interpersonales, que conllevan en muchas ocasiones un contacto físico muy propio de nuestra cultura y muy diferente en relación a otras culturas del mundo. Vamos a conocer las situaciones en las que se da esa cercanía, en qué consisten los gestos y las interacciones físicas que se ponen en juego y cuál es su significación entre familiares, conocidos o amigos.
LOS ESPAÑOLES SON TOCONES Y BESUCONES
Antonella:Los españoles son muy simpáticos y cercanos, al menos los que yo conozco.
Michelle:Y un poco tocones…bueno, sólo algunos…
Robert:Es que los saludos entre españoles implican besos, abrazos, palmadas en la espalda…Tocas más el cuerpo del otro y los otros tocan más tu cuerpo.
Tatiana:Sí, pero es por el afecto y porque es así como se saluda aquí. A mí me resulta agradable. A mí me gusta el besuqueo entre amigos.
John:A mí me resulta excesivo…Prefiero menos contacto físico con amigos y conocidos.
Bien, queridos amigos, lo más probable es que los dos adjetivos del título de nuestro episodio, os resulten un tanto desconocidos, o, como mínimos, curiosos. Son, en singular:
- tocón / tocona
- besucón / besucona
Tocón, con sufijo aumentativo al final: toc-ón, deriva de tocar.
Y:
Besucón, igual, con sufijo -on, derivándose ahora del verbo besuquear (o besucar, ambos son válidos). Y, en origen, del verbo besar.
Es cierto que este sufijo es típicamente aumentativo, como en estos ejemplos:
- caserón (una casa grande y quizás algo antigua)
- grandullón (hombre grande, en general)
- nubarrón (nube enorme)
- cucharón (cuchara grande de servir)
- notición (noticia de gran valor y trascendencia)
Pero también es cierto que funciona como sufijo despectivo que implica una apreciación, a veces, un tanto negativa. Y muchas veces entraña ironía, burla o un cierto desprecio, incluso un cierto rechazo (depende de quién usa la palabra y a quién va dirigida).
En el caso de:
- tocón/-na
- tocones
y
- besucón/-ona
- besucones
Están implícitas una o varias de estas características, y puede tener connotaciones despectivas, irónicas, burlonas o directamente negativas.
Tocón es un adjetivo coloquial muy usado para referirse a alguien que tiene la costumbre de tocar al otro. O mejor dicho, toquetear a las personas con las que se relaciona.
Un tocón toca repetidamente las cosas o a las personas, a veces de manera inapropiada. A veces, de manera lasciva, aunque solo algunas veces (cuidado, porque entonces ya no es gracioso, sino reprobable). ¿Cuáles serían los sinónimos de tocón? Pues:
- sobón
- mimoso
- empalagoso
Un besucón es alguien que da muchos besos. Un adjetivo coloquial que califica a alguien que besa mucho, que roza y toca al que besa, de manera repetitiva y frecuente.
Los sinónimos vienen a ser los mismos de antes. Una persona besucona puede ser considerada también una persona:
- sobona
- mimosa
- empalagosa
- besucona
- besuqueadora
Etc.
Pero no son solo estas dos palabras las que tienen connotaciones un tanto despectivas o irónicas, incluso negativas, dependiendo de los interlocutores y la situación.
En español hay muchas otras palabras con este sufijo que cobran estas connotaciones en el uso comunicativo habitual.
Una palabra de uso divertidísimo en español es:
- moscón
Obviamente, palabra derivada de mosca. Un moscón y un moscardón son moscas grandes. Pero… ¿qué es un moscón, en sentido figurado? Pues es un tipo impertinente y molesto, sobre todo un hombre que intenta relacionarse con una mujer de manera pesada e insistente. Tiene un sentido despectivo y burlón. Los ejemplos serían:
- Estoy harta de ese moscón que me sigue a todas partes en la fiesta. Antes he sido educada, pero ahora voy a mandarlo a freír espárragos.
- Es horrible, no se puede venir a una discoteca. Enseguida te rodea el típico grupo de moscones ligones y es que ya no puedes ni bailar un rato.
- bravucón
También despectivo y burlón. Palabra derivada de bravo, en el sentido de valiente. Un bravucón es alguien que quiere dar la apariencia de valiente, sin serlo. Por ejemplo:
- Pedro es ridículo. Va de bravucón, pero nadie le tiene miedo; sólo provoca risas…
- Cuando bebe mucho, se pone bravucón y se pelea con todo el mundo.
- criticón
Palabra derivada de crítica, aquí, adjetivo. Un criticón o una criticona es alguien que lo critica todo por sistema y que habla mal de todo, de todos y de todas sus acciones. Un ejemplo:
- Oye, pero no seas tan criticona. Laura tiene defectos, como todos. Pero también tiene muchas cosas buenas.
- machacón
Proviene de machacar. Se usa con un sentido irónico y algo despectivo. Un tipo machacón, o una mujer machacona, es alguien muy pesado que repite mucho, mucho las cosas. Alguien que es muy pesado, un pelma, cargante y reiterativo. Mirad los ejemplos:
- Este profesor es un machacón. Ha repetido cuatro veces el tema. Y cada día igual. ¡Qué pesado!
- Mamá, ya me has dicho tres veces a qué hora tengo que volver a casa.¡Qué rollo! ¡Te pones muy machacona!
O cuando decimos de forma irónica:
- contestón
A alguien, generalmente un niño, que responde medio mal a quien le riñe o le manda hacer las cosas. Se usa mucho con los niños:
- Pepito, no seas contestón. Sólo te digo que ordenes tu habitación.
- Venga, niñas, no protestéis más porque es la hora de irse a dormir. Sois muy contestonas.
Tenemos otra palabra de esta categoría y con sentido irónico y despectivo que es:
- bobalicón
Que proviene de tonto, bobo. Un bobalicón es alguien inocentón, bobo, tontorrón, que tiene pocas luces.
- David se cree todo lo que dicen, es muy inocente y un poco bobalicón.
- Ella intenta explicarse bien, pero le cuesta mucho esfuerzo. Desde siempre ha sido un poco bobalicona.
No digamos ya la palabra:
- empollón
Que no es ningún piropo, sino un adjetivo despectivo (de empollar, forma coloquial para referirnos a estudiar mucho). Los empollones son los que suelen estudiar mucho, los que sobresalen por estudiar mucho, pero que pueden -o no- ser inteligentes…
- No, no voy a invitar a Bruno a la fiesta. Siempre dice que no puede, que tiene mucho que estudiar. Es un empollón que no sabe pasárselo bien.
- Rosa sólo vive para los estudios. Es una empollona que no está interesada ni por los chicos, ni por las fiestas ni por nada que sea divertido.
Otra forma divertida y despectiva de calificar a alguien que le gusta la comodidad, o el no hacer nada, es llamarle:
- comodón
Proviene de comodidad y de cómodo/a. Un comodón (una comodona) es alguien que no colabora, un poco vago, alguien que no se esfuerza mucho en las cosas. Como en:
- Me pone negra. Juan es un comodón. Ni siquiera ayuda a poner la mesa. Pero qué se ha creído, ¿que estamos en la época medieval?
- Oye, no seas tan comodón. Vamos a hacer la comida entre los dos que los dos estamos cansados, ¿vale?
O, en último lugar, se me ocurre otro término despectivo e irónico, que es:
- barrigón
Proviene de barriga, tripa. Alguien que tiene una barriga prominente, abultada, visible. Un tipo barrigón es alguien probablemente gordo, tripudo y con una panza prominente. Por ejemplo:
- Enrique tiene que dejar el pan y la cerveza. Se ha puesto barrigón y ya no es tan atractivo.
- Voy a hacer dieta. No me gusto a mí misma tan barrigona.
¿Lo veis, verdad, amigos? Este tipo de palabras, en español, tienen estas connotaciones irónicas y despectivas (aunque no siempre), incluso con un punto de burla en ocasiones.
Así es que, esa es la explicación de nuestros título del episodio:
- Los españoles son tocones y besucones
Y lo son en distinto grado. El grado más básico es el que explica Antonella en su frase primera:
- Los españoles son muy simpáticos y cercanos, al menos los que yo conozco.
Es cierto que la cultura que define las relaciones entre españolas y españoles se basa más en la cercanía y en el contacto, que en otras culturas.
Es de todos conocido que muchas veces nos saludamos con dos besos en la cara: mejilla derecha, mejilla izquierda…, muacs, muacs, beso en mejilla, labios en la mejilla del otro…¡Muy íntimo, sí! ¡Demasiado íntimo!…Pensaréis muchos de vosotros.
Y además ¿por qué dar dos besos para saludar? La verdad es que lo hacemos muchas veces: saludas a amigas o amigos…¡muac-muac, dos besos! Saludas a familiares…, ¡muac-muac, dos besos! Saludas a alguien que te acaban de presentar…o dos besos, o dar la mano, pero muchas veces dos besos.
A nosotros, a las españolas y españoles, esto nos parece lo más normal del mundo. A nosotros no nos extraña. Es habitual en nuestra cultura y lo consideramos normal. Lo que está en la cultura de los pueblos, para ese pueblo es normal, para los otros (con otros parámetros culturales) puede ser extraño, inapropiado, excesivo, …Y en nuestra cultura lo consideramos bastante normal.
También en Italia se dan dos besos, aunque empieza la mejilla izquierda y sigue la derecha. Pero son dos besos en la cara. En Francia y en Rusia son tres. También son tres en Alemania, Bélgica, Suiza y Holanda. En buena parte de América, sólo uno.
Ciertamente, en muchos otros países, la gente se saluda con cero contacto físico, optando por una ligera inclinación de cabeza, como en Japón.
En España solemos dar dos besos cuando hay confianza (amigos, familia,…) y se plantea en situaciones informales. Y sin embargo, en el trabajo no se hace. Y tampoco en los ambientes declaradamente formales.
Son besos silenciosos, secos, más bien mejilla contra mejilla. Los labios no llegan a tocar la mejilla, habitualmente no.
El beso más beso, más sonoro, más de labios en la mejilla, es para relaciones de mucha, mucha confianza, e incluso de mucho afecto (con tus hijos, con tu pareja).
Esto no siempre es así, ni tampoco es una obligación. Muchos de nosotros simplemente damos la mano (a alguien que no conoces o que no te apetece entrar en contacto con su cara…) o hacemos un gesto de “hola” con la mano, pero sin chocarla.
Por eso en España, los “besos de mejilla” son saludos especialmente aceptados como felicitación o como simple interacción de cordialidad.
En estos besos no hay contenido romántico y muchos menos plantean connotaciones de tipo sexual.
Esto hace que la mayoría de mis compatriotas (españolas y españoles) se consideren cariñosos y cercanos. Se les considera simpáticos y cálidos al saludar. Se crea un inicio de interacción más cercana, más confiada, más sociable…Un inicio que puede facilitar la relación que viene después.
Y sí, ciertamente, saludamos, besándolos, a:
- conocidos
- amigos
- familia
- personas que nos presentan (aunque no siempre)
Hay que añadir que los europeos, en general, son las personas que más besan en las presentaciones. A continuación se sitúan los sudamericanos, normalmente con un solo beso, al igual que los norteamericanos, con un solo beso y con discreción. Y los orientales que son los que menos usan este saludo con beso.
Concretamente en Estados Unidos, el saludo va a depender de en qué Estado americano te encuentres; va a depender también del círculo social; e incluso va a depender de si nos ubicamos en contextos urbanos o rurales.
O en Canadá, Reino Unido o Alemania, donde se besa a los familiares.
En algunas zonas de Francia y Holanda, no se dan uno, ni dos, sino tres besos, pero no es una costumbre generalizada.
Así es que, en España, se besa al saludarse, y a veces se acompaña (ese saludo) de un abrazo efusivo, de unas palmadas afectuosas en la espalda, etc. Es decir, sí, tocamos, nos tocamos, nos rozamos, somos cercanos, mostramos más calidez hacia el otro…, pero sin pasarnos como algo que es cultural, ritual, común…Pero hasta ahí, ahí se queda.
Lo que pasa es que, a veces, comparando estas prácticas con las de otras culturas, sí que llegamos a decir con mucha guasa, de broma, que:
- somos un poco tocones
Y
- un poco besucones
Pero cuando lo decimos nosotros, de nosotros mismos, lo hacemos sin connotaciones despectivas ni negativas, sólo como forma simpática de hablar de esta cercanía y de nuestra calidez en las relaciones.
Ahora bien, ¡cuidado!, lo que yo explico es lo que pasa en mi país. Porque es probable que esta misma costumbre no esté bien vista en otras culturas, y sea objeto de crítica. Sirva como ejemplo lo que sucedió en Dubai entre Charlotte Lewis (una turística británica) y Aiman Nayafi (un ejecutivo de una consultora internacional), quienes pasaron un mes en prisión por darse un beso en la mejilla. Y de esto hace tan solo 8 ó 9 años, no es una anécdota de los años cincuenta.
Pero hay que entender a la perfección que si esta forma de saludo no es de tu cultura y no estás habituado a practicarla, te resulte extraña, inadecuada, innecesaria y, en algunas situaciones, incluso violenta.
Pero si vienes a España, o estudias nuestra cultura, tienes que saber cómo funcionan las cosas aquí para conocernos y entendernos mejor.
Y también por eso, cuando nosotros vamos de viaje, sabemos que nuestra forma de saludar no es universal y que cada cultura tiene su propia idiosincrasia, también en el tema de los saludos, del contacto físico, de la cercanía o distancia que se puede mantener, o del grado de confianza y familiaridad que puedes ejercer para respetar los usos y costumbres de la cultura que visitas.
De ahí que haya sido Antonella, nuestra querida amiga italiana, cuya cultura del saludo es totalmente similar a la española, quien haya iniciado este diálogo, diciendo:
- Los españoles son muy simpáticos y cercanos, al menos los que yo conozco.
Hasta aquí nuestro séptimo estereotipo, que es cierto si lo enfocamos en términos de cercanía, calidez, amabilidad y familiaridad. Desde estos puntos de vista, es cierto. Y lo es, sin connotaciones negativas ni irónicas, al menos para nosotros los nativos, claro.
Sin embargo, nuestra querida amiga francesa, Michelle, lo matiza un poco:
- Y un poco tocones…bueno, sólo algunos…
¿Por qué dice esto Michelle? Puede haber dos razones:
- La primera razón es que Michelle no está acostumbrada a la frecuencia de los saludos “afectivos” que nos intercambiamos en España y le resulten algo invasivos, al menos algunos más efusivos o más enfáticos.
2. La segunda razón es que, en los círculos de amigos que Michelle frecuenta, haya alguien un poco pulpo (ja ja ja…) con brazos a modo de tentáculos, y la haya hecho sentir incómoda. Es posible, aunque puede que no…, digo que es una posibilidad.
Lo que sí es cierto es que Michelle ha tenido una vivencia de “excesiva cercanía” o de “demasiada calidez” en alguna interacción y por eso echa mano de ese adjetivo, “tocones”. Aquí hay una cierta crítica, aunque con algo de humor. Es como decir:
- Sí, son cálidos, son cercanos, pero algunos son un poco tocones.
Y, queridas amigas y queridos amigos, si te topas con un tocón, o con una tocona, pero esta vez en el mal sentido del término, páralo en seco, aquí y en las antípodas, estés donde estés, estés en lo cierto o sea un error…Si tú lo sientes como que se está pasando de la raya, si tú percibes que ese tipo de contacto no es adecuado, hazle saber que no te sientes cómodo o cómoda, y que prefieres mantener otro tipo de interacción. Sí, ya lo sé, es muy violento decir eso, pero lo es más soportar ese presunto abuso, por pequeño que sea.
Los auténticos “tocones” (pero no de broma, sino en serio), los manos largas, los pulpos, hay que pararlos en seco, frenarlos con firmeza. Y, desde luego, amigos, eso no es típico de los españoles; qué va….Esos pulpos están en todos sitios, desafortunadamente.
Robert dice ahora:
- Es que los saludos entre españoles implican besos, abrazos, palmadas en la espalda…Tocas más el cuerpo del otro y los otros tocan más tu cuerpo.
Robert dice esto porque, para él, este formato de saludos es diferente al de su tierra natal, USA, pero él lo explica complacido ya que a él le gusta ese contacto físico mesurado, respetuoso -diría yo- que transmite familiaridad, confianza y afecto.
Por eso, a continuación, Tatiana añade:
- Sí, pero es por el afecto y porque es así como se saluda aquí. A mí me resulta agradable. A mí me gusta el besuqueo entre amigos.
¿Veis, amigos? Tatiana da una razón:
- Sí, es por el afecto.
Y otra más:
- Así es como se saluda aquí, en España.
Y se posiciona:
- A mí me resulta agradable.
Y aún:
- A mí me gusta el besuqueo entre amigos.
Ella es capaz de usar “besuqueo” positivamente, con humor, porque previamente ha dicho que esos saludos le resultan agradables, que le gusta el besuqueo entre amigos, y que a ella le resulta afectuoso y es una costumbre española que le resulta grata.
El último en intervenir es John, quien declara un cierto rechazo a esta forma de saludo. Y lo explica muy bien. Dice:
- A mí me resulta excesivo…Prefiero menos contacto físico con amigos y conocidos.
Fijaos. El término que usa es “excesivo”. El besuqueo, los saludos efusivos con besos o abrazos, es una costumbre española que le resulta excesiva a John, porque -dice- prefiere menos contacto físico con amigos y conocidos. No es que lo rechace totalmente, pero es sincero al reconocer que es demasiado para sus estándares de interacción con conocidos y amigos. Y creo que todos lo entendemos prefectamente…¡Cómo no!
Así es que, bueno, cuando lo decimos nostros, con humor y de broma, podemos aceptar el estereotipo de que los españoles somos tocones y besucones. Pero, amigos, de buen rollo. Porque si nos lo dicen mal, con menosprecio, quizás nos moleste ya que para nosotros está unido al afecto, a la cercanía, a la familiaridad, a la calidez y a la simpatía. Y no está nunca unido a los negativo ni a lo abusivo.
Recordad esto si queréis usar estas expresiones adecuadamente.
Escuchemos de nuevo el pequeño diálogo para repasar todo lo que hoy trabajado en este episodio:
Antonella:Los españoles son muy simpáticos y cercanos, al menos los que yo conozco.
Michelle:Y un poco tocones…bueno, sólo algunos…
Robert:Es que los saludos entre españoles implican besos, abrazos, palmadas en la espalda…Tocas más el cuerpo del otro y los otros tocan más tu cuerpo.
Tatiana:Sí, pero es por el afecto y porque es así como se saluda aquí. A mí me resulta agradable. A mí me gusta el besuqueo entre amigos.
John:A mí me resulta excesivo…Prefiero menos contacto físico con amigos y conocidos.
Si este podcast te ha resultado útil y te ayuda a progresar con tu español, puedes tú también ayudarnos a continuar con futuros podcasts haciendo una donación (a donation) en la página de inicio del sitio web de Spanishpodcast (www.spanishpodcast.org), donde pone “Ayuda a mantener esta web. Donar”.
Please help support my ongoing podcasts by making a donation. The sole support for my work comes from listeners like you. It is easy to donate. You can donate by going to Spanishpodcast (www.spanishpodcast.org), and choose the option Donar. Hasta la próxima, un abrazo. Chao, amigos. Julio de 2019.
Hasta la próxima, un abrazo. Chao, amigos. Julio de 2019.
*************************